No, no va a volver.Ya sé que lo sabes, aunque a veces pasa que no terminamos de creernos las cosas hasta que no lo oímos de otra boca, tal vez por esa habilidad que tenemos para escondernos lo que, aunque sepamos bien, preferimos ignorar.
No, no va a volver.Y da absolutamente igual cuánto eches de menos. Cuánto llores, cuánto añores, cuánto supliques o cuánto te emperres pataleando y aporreando la pared. No importará cuánto desees con toda tu alma que vuelva todo aquello que una vez fue, cuánto esperes que pueda volver a ocurrir, cuánto tiempo te quedes mirando la puerta a ver si retorna lo que se marchó para no regresar.
No, no va a volver.Puedes hacerte los juramentos internos que quieras, puedes fantasear y soñar lo que quieras y desesperarte al despertar del dolor que ello te causa a diario, puedes negarte a perder la última esperanza por preferir la herida antes que la cura, por preferir vivir en la mentira que aceptando la realidad que en el fondo sabes mejor que nadie, pero no va a volver.
...Qué puedo decirte, así de condenada es la vida.
No van a volver ninguna de esas cosas que necesitas, aquellas que te hacían sonreír de verdad y no esa sonrisa fingida que tienes ahora y que difiere tantísimo respecto a aquella verdadera de hace tantos años, esa que muy dentro de ti te desesperas porque nadie parece notar la diferencia. No van a volver ninguna de esas palabras, ninguno de esos gestos en los que sentías que nada podía contigo, ninguna de aquellas fotos en que realmente eras feliz.
No, vida, no van a volver.Y aunque me duela en el alma verte así, no seré uno más de los que te mienten, de los que te dicen lo que necesitas escuchar sin creérselo sólo por tenerte piedad.No pienso tenerte ninguna piedad. No a ti. Te quiero demasiado como para ello.Pienso mirarte a los ojos, y a no permitirte que bajes la cabeza aunque llores, y a decirte que no, que no van a volver.
...Pero sí puede volver aquella. Sí puedes volver tú.Puedes volver a ser la que fuiste, puedes volver a demostrarle a la condenada de la vida que al final ganas tú, puedes volver a hacerte fotos con esa misma felicidad, puedes volver a encontrarte con la sonrisa de aquellos días.
Vuelve tú a ti, y entiende que lo único que verdaderamente necesitas en tu vida es que tú estés contigo.
Tienes que aceptarlo cariño, aunque ahora te corran ríos de lágrimas por las mejillas de pena, de tristeza, de desolación: no van a volver.
Pero tú sí. Tú vas a hacerlo.
Así que duélete lo que necesites, y respira. Cuando sientas que no puedes bajar más, cuando consideres que has tocado fondo, cuando te desesperes tanto viéndote tan abajo que sientas que ha llegado el momento de levantarte, solamente quiero que sepas que te estaré esperando en el camino, como ayer, como siempre, mirándote a los ojos, con todo el amor que te tengo, y repitiéndote una y otra vez que no me cabe ninguna duda, que pongo el brazo entero en el fuego, que apuesto por ti cien mil vidas.
Volverás.Volverás tú a ti.
Texto: JF Torres...Skirt: Dresslily / Boots: Bershka / Sweater: Sheinside / Hat: C&A...Pics by: Max de Robles